.........Pierre Anthon, de trece años, abandona la clase en un pueblo danés, exclamando: “Nada importa. Hace mucho que lo sé. Así que no merece la pena hacer nada. Eso acabo de descubrirlo… “
Este es el último libro que acabo de leer; no había oído ni leído, nada sobre él, una tarde andando entre los libros , captó mi atención su titulo, pero seguí mirando, paseando , me gusta esa sensación, no sé si de encontrar el libro o mas bien que el libro me encuentre a mí. Encontrarse, es justo ese instante donde tu mirada viaja seducida y serena, para detenerse en el lugar, ese que en lo profundo sabes que es.
Una vez captada mi atención, volví a buscarlo, seguía fascinada con su título, la palabra NADA despierta desde siempre curiosidad en mí,(quizás en otro momento le dedique un post) es una palabra "sin sexo", definirla , sentirla, a veces, me intimida.
La lectura de NADA esta llena de cambiables sensaciones, apacible al comienzo, después extraña y fuerte , de estomago muchas, incrédula otras, ...........para acabar filosofando que Nada es parte de Todo y viceversa, pasados unos días de su lectura, con lo que me quedo es: sencillamente sentirme intensamente viva.
Coni